Cine de superhéroes en la actualidad

 

         Hace unos días tuve una conversación con un usuario de Threads pues este hizo una publicación en la que desearía ver pronto una película de superhéroes tan estupenda como “The Avengers” de 2012. La conversación que tuvimos fue llevada hasta el fin de esta en buenos términos, y en ella dije que sí y que no al mismo tiempo. Ambos expusimos nuestros puntos y terminé sintiendo que el corto debate que se suscitó entre ambos fue llevado de la mejor manera. En los siguientes párrafos iremos viendo el por qué expuse mi respuesta con esas dos variantes, así como ampliaré lo escrito allí, no sin antes recalcar eso: que el punto de vista que se expresará a continuación es de quien escribe la presente nota.

 

         Para empezar, no voy a decir que se dejen de hacer este tipo de películas pues entran dentro de lo que tiene que ver el género de acción, y este ha existido desde siempre. Eso es algo bien sabido y si han presentado secuencias de acción con mucho estilo como lo visto en, por ejemplo, “The Matrix” o “Sin City”, no se puede decir simplemente que “no”. En vez de eso, apelo más bien a decir “¿por qué no?”. Mucho del cine que se ha visto en estos últimos años ha presentado trabajos que han valido el esfuerzo de su visionado, y sería tonto no destacar trabajos recientes como “The Unbearable Weight of Massive Talent”, comedia de acción bien llevada e interpretada (principalmente) por Nicolas Cage y Pedro Pascal. O “The Batman”, donde no sólo se explora más el aspecto detectivesco del personaje, sino que también cuenta con estupendas secuencias de acción, y ni hablar de “Top Gun: Maverick”, una de las mejores del año 2022, donde todo funcionó en su conjunto, triunfando tanto en la audiencia como en la crítica. Como lo dije en esas interacciones en la mencionada Threads, “cosas planificadas, bien pensadas, que no sean para quitarle dinero a la gente”, ese es el tipo de trabajos, llámese de acción o de superhéroes, que se deberían plasmar en cine todo el tiempo.

 

         Pero está la otra cara de la moneda, una que es totalmente comprensible, y que no faltó razón cuando expusieron este punto. El cine, al igual que otras cosas de la vida humana, debe ser capaz de sostenerse, y sus realizadores (al igual que tú, que estás leyendo este artículo, y yo que lo escribo) son seres humanos como nosotros, y como lo expusieron al otro lado de la conversación, “hacer cualquier tipo de película tiene un fin comercial de alguna manera, y cada género responde a las necesidades de un segmento de mercado. Hay demasiados gustos, y el cine busca cubrirlos todos de alguna manera. Lo que para Ud. puede ser malo, para otros es muy bueno, y eso no los hace menos, solo los hace diferentes. No creo que un director de cine de estudio grande o de cine independiente viva simplemente del aire, de alguna manera su realización le genera ganancias”. No pueden vivir únicamente de que la prensa diga cosas como “una de las mejores películas del año”, “no se la pierdan” o de los aplausos del público. Ellos, repito, son seres humanos, y ni esos comentarios ni los aplausos, lamentablemente, no son capaces (aún) de cosas como pagar la renta básica de una línea telefónica, comprar comida o pagar servicios, por decir lo menos. Sí se comprende este punto, pero  como lo mencioné, deben hacerse las cosas bien, que se planifiquen y lleguen a buen puerto, pues al final, si me haces una mala película a nivel cinematográfico, pero triunfa en taquilla, lo único que lograrán los estudios es llenarse los bolsillos de estos y de los realizadores que hicieron esa película mala, pero también llenarnos de trabajos que no valdrá el esfuerzo ver, que se burlen de los espectadores tomándolos como seres hechos de papel que no piensan.

 

         Y el cómo cerramos este mini-debate fue de una manera muy sencilla, en la que se sintió que ambas partes quedamos satisfechas con los puntos expuestos, pues mi respuesta fue “claro, tu punto se comprende, de alguna forma deben conseguir ganancias para vivir y para financiar futuros trabajos que no tengan que ver con superhéroes, pero como dije, no quisiera que se volviera a esa época donde sacaban películas de esas como churros. Además, reconozco que hay grandes trabajos en ese género, y de las que han sacado en estos años, me quedo con "Joker". Un presupuesto bajísimo les otorgó enormes ganancias a todos, y entre otros premios, un Oscar a Joaquín Phoenix”. He ahí un gran ejemplo de que, efectivamente, deben existir, y esta se tomó su tiempo, además de que tuvo tanto éxito que el presupuesto (estimado) que tuvieron entre 55 y 70 millones de dólares alcanzó un total de $1.079 millones de dólares en taquilla. Y es acá que sale a relucir algo en un momento en que este género no está en su mejor forma en los tiempos que corren: el hastío de la audiencia. De nuevo, no es que no se hagan adaptaciones basadas en, por ejemplo, “Superman” o “Blade”, pero no me satures el mercado con tantos superhéroes, pues otra de las consecuencias que viene derivada de ahogar el mercado con tantas películas de “Batman” o “Captain America” es que le quitas la oportunidad a otro cineasta de presentar su trabajo para quienes han apoyado su obra (y podría pasar a la posteridad), y un ejemplo de ello se está viviendo con el director Francis Ford Coppola, pues su película que le permitirá regresar después de muchos años sin presentar nada nuevo, “Megalopolis”, se encontró primero con el obstáculo de que ningún estudio la financió y Coppola solucionó el punto del presupuesto colocando los $150 millones de este de su propio bolsillo, y ahora tiene el obstáculo de que ningún estudio quiere distribuirla ni a nivel Estados Unidos ni a nivel local. Por lo pronto, el director tiene previsto estrenar su más reciente película en la competencia del venidero Festival de Cine de Cannes el próximo mes de mayo, pero como se dijo hace poco, se le está dinamitando la posibilidad de que el film que le permitirá regresar al ruedo no lo quieren distribuir.

 

         Una vez más, no se trata de que no se hagan más películas de superhéroes o de acción, sino de que no sobresaturen el mercado con ellas pues las consecuencias se verán en cualquier plazo, y en lo inmediato ya las estamos viviendo. Finalizaré estos párrafos como lo expresé también en esa conversación: “al que no me crea, que mire no más la desastrosa "Madame Web", que la considero la peor del año (hasta ahora)”.